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La Atlántida
La Atlántida ¿leyenda o realidad? Es uno de
los mitos más antiguos de la historia.
Se cree que era una isla de grandes dimensiones,
incluso llegaron a considerarla un continente en
algún punto del Mediterráneo o por lo menos eso es
lo que dice la leyenda. Algunos científicos la sitúan
cerca de Suiza y Nueva Zelanda; otros, piensan que, en realidad,
podría tratarse de la isla de Creta.
Allá por el año 350 a.C Platón la mencionó
en sus escritos. La búsqueda de ese lugar
idílico cuya civilización, en teoría, era
muy desarrollada para su tiempo ha sido motivo
de muchos estudios y especualaciones.
¿La Atlántida hallada por Google Earth?A
principios de este año 2009, el ingeniero
aeronáutico Bernie Bamfor aseguró haber encontrado
una pista para averiguar dónde está la Atlántida ya que
esta aplicación integra datos sobre la estructura del fondo
oceánico recogidos por barcos a través del sónar.
Según esta hipótesis, la situación de la ciudad sumergida
que cuenta la leyenda es: 31°15′15.53 N, 24°15′30.53 W y
se encuentra al oeste de las islas canarias.
(La imagen de la derecha es la que encontró Bernie Bamfor).
Cuando Moisés llegó a la Atlántida
Una de tantas figuraciones de cómo era la Atlántida.
No salgo de mi asombro. Si alguien pensaba que al ganar el
No salgo de mi asombro. Si alguien pensaba que al ganar el
Mundial España había tocado techo es que no sabe de qué está hablando. Ahora resulta que somos el origen de la civilización y que la Atlántida, ese continente inexistente del que habló Platón en dos de sus obras (Critias y Timeo), está en Doñana. Lo dice un sesudo a
rtículo dominical. Echa pestes el redactor ya que, al parecer, los malvados “científicos serios” se empeñan en negarlo y “pretenden poner orden ciñéndose a pruebas objetivas y a
provechando las ventajas del razonamiento lógico”. Qué cabrones y qué pesados con su manía de pensar y exigir pruebas.
rtículo dominical. Echa pestes el redactor ya que, al parecer, los malvados “científicos serios” se empeñan en negarlo y “pretenden poner orden ciñéndose a pruebas objetivas y a
provechando las ventajas del razonamiento lógico”. Qué cabrones y qué pesados con su manía de pensar y exigir pruebas.
Se ríe el redactor del reportaje publicado en Ideal de la “historiografía ortodoxa” p
or considerar tabú el debate. No es que sea tabú, es que el debate sobre la Atlántida está superado hace ya algunos añitos, pero se ve que se olvidaron de avisarle. El tipo nos cuenta que es nada menos que el Consejo Superior de Investigaciones Científicas el que podría encontrar el co
ntinente perdido. Como debe de ser de letras y le cuesta sumar dos y dos (que son cuatro, ya se lo digo yo) no se da cuenta de que los del CSIC se tienen por “científicos serios”, sus trab
ajos nutren la “historiografía ortodoxa” y me juego lo que sea a que nadie en la institución –e incluyo a los bedeles- cree que la Atlántida existió y esté en Doñana. De hecho, la i
nstitución nunca ha dicho que busque la Atlántidasino que lleva años investigando lo que podría ser una construcción con estructura circular en la desembocadura del Guadalquivir
or considerar tabú el debate. No es que sea tabú, es que el debate sobre la Atlántida está superado hace ya algunos añitos, pero se ve que se olvidaron de avisarle. El tipo nos cuenta que es nada menos que el Consejo Superior de Investigaciones Científicas el que podría encontrar el co
ntinente perdido. Como debe de ser de letras y le cuesta sumar dos y dos (que son cuatro, ya se lo digo yo) no se da cuenta de que los del CSIC se tienen por “científicos serios”, sus trab
ajos nutren la “historiografía ortodoxa” y me juego lo que sea a que nadie en la institución –e incluyo a los bedeles- cree que la Atlántida existió y esté en Doñana. De hecho, la i
nstitución nunca ha dicho que busque la Atlántidasino que lleva años investigando lo que podría ser una construcción con estructura circular en la desembocadura del Guadalquivir
Para llegar a tan peregrina conclusión, el tipo nos vuelve a endiñar por enésima vez (tirando por lo bajo) lahistoria del alemán Heinrich Schliemann que descubrió Troya utilizando la Iliada como única referencia. La hipótesis de la Atlántida y olé la formuló en 1922 otro arqueólogo
alemán, Adolf Schulten, quien sostenía que Tartessos pudo haber sido la inspiración de Platón. Luego el pretendido investigador Georgeos Díaz-Montexano
aprovechó una investigación del CSIC para volver a poner de moda la peregrina teoría aprovechando que la zona en la que se realiza coincide con la ubicación de la mítica Tartessos.
De Tartessos se sabe poco,
pero lo suficiente como para descartar que
pudiera haber sido el mítico continente. Si sabemos poco es por la ausencia de restos y referencias.
Es decir, no pudo ser una civilización con “un poder insolente que invadía a la vez toda Europa y toda Asia” ni “un imperio grande y maravilloso”, como apuntó Platón en Timeo. Eso sin entrar a valorar que el filósofo hablaba de una isla tan grande
como “Libia y Asia” y que hasta los
damnificados por la Logse saben que Doñana no es una isla.
Tampoco parece muy propio confundir un lugar más allá de las columnas de Hércules (Gibraltar) con el sur de España.
pero lo suficiente como para descartar que
pudiera haber sido el mítico continente. Si sabemos poco es por la ausencia de restos y referencias.
Es decir, no pudo ser una civilización con “un poder insolente que invadía a la vez toda Europa y toda Asia” ni “un imperio grande y maravilloso”, como apuntó Platón en Timeo. Eso sin entrar a valorar que el filósofo hablaba de una isla tan grande
como “Libia y Asia” y que hasta los
damnificados por la Logse saben que Doñana no es una isla.
Tampoco parece muy propio confundir un lugar más allá de las columnas de Hércules (Gibraltar) con el sur de España.